Sí, sabemos que da mucha pereza estarse preocupando en esa área especial. Nos acordamos de ella solo cuando la necesitamos, y en más de una ocasión nos ha dado una mala sorpresa, o al menos motivos de preocupación.
El asunto va así. Fíjate. Hay unas glándulas llamadas apocrinas, que están en la piel por todo ese sector. Estas glándulas, presentes en los folículos pilosos, es decir, donde hay pelo, expulsan un sudor que puede volverse particularmente maloliente cuando se mezcla con bacterias.
Si tienes un bosque húmedo, pues las bacterias hacen fiesta. Si ese bosque húmedo no se limpia continuamente, pues el olor te lo podrás imaginar. Los vellos absorben el mal olor, así que, después de limpiarte la piel, pueden seguir apestando si no te los limpias profundamente.
Muchos hombres han decidido, por comodidad e higiene, podar, recortar, rebajar o incluso, afeitar esa zona. Además, como beneficio indirecto, todos sabemos que el árbol se ve más grande sin pasto en el tronco.
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